Era obvio. Algunos premios ya caían por sobreentendido quién se los llevaría, mientras que otros estaban en la dulce sospecha. Es totalmente visible la cuestión de cuándo el producto es premiado por rating a por calidad. Eso se manejó siempre así y no hay nadie que, a estas alturas, pueda hacer algo.
De todos modos, nadie es digno de juzgar a APTRA porque son ellos quienes mandan y son ellos quienes votan. Nadie puede opornerse, pero sí, ya ahora, tener opiniones diversas. Pensar que el producto pudo haber merecido algunos premios más de los que obtuvo.
Los grandes castigados por el voto fueron, entre otros, Mujeres Asesinas, quienes el año anterior se llevaron todos los premios. Hermanos y Detectives y hasta El Tiempo no Para, casi se quedaron con las manos vacías. Casados con Hijos 2, también, aunque muy merecido el premio de Erica Rivas.
Sorprende, en realidad, el no-premio a Carola Reyna. Y podemos debatir sobre los injustificados que se alzó Montecristo. Tal vez vieron que Vientos de Agua se estaba llevando muchos más premios que ellos y querían darle el Oro al éxito del 2006.
No fueron repartidos y eso que había ficciones que sí se lo merecían, mientras que Se Dice Amor, en su única terna en donde figuraban, ganó. Una pena. Realmente, por lo menos yo, esperaba un poco más.
